IAcabo de ver el final de etapa de la Vuelta Ciclista a España, con final en los miticos Lagos de Covadonga, y salvando las distancias, me ha recordado en ciertos aspectos a la ruta realizada hoy, bonitos paisajes, pendientes, lluvia y bajadas muy complicadas.
Mañana inmejorable, nublada y con una temperatura excepcional para la práctica del ciclismo, donde un grupo de 7 bikers, dominado por los Antonios ( un total de 4 ), nos dispusimos a realizar la subida a Cardeña. Las multiples ferias se han hecho notar en el número de bikers, muchos de los cuales nos bombardearon de madrugada en el guasap, sobrehidratandose.
Nos dirijimos hacia Villa del Río, donde pronto percibimos que hoy nos ibamos a mojar, y donde vimos una de las fotos de la ruta, con un grupo de cigüeñas, descansando en su migración.
En Villa del Río se nos unieron Juan Antonio y Antonio ( 1,5 ANTONIOS MAS), que realizarian la ruta con nosotros.
Pronto empezamos a notar las primeras gotitas de agua, de momento en forma de cala bobos, mientras subíamos hasta los ventorrillos. En el cruce del pantano, Fernando se tuvo que dar la vuelta por una jaqueca que empezaba, y que afortunadamente tras llegar a casa, pastillon y descanso, no pasó a mayores. El resto continuamos, ahora subiendo a los rasos.
A media subida, la anécdota de la jornada, al encontrar un caballo suelto en medio de la carretera, y que asustado nos perseguia, cosa que a un servidor no le hace mucha gracia y que hizo que me escapara del pelotón hasta las rasos. El presi en un acto ejemplar de civismo, dio parte al 112, para evitar algun accidente.
En los rasos me abortaron mi escapada, pues Toni no aparecía, por lo que el grupo paró, a ver que le había pasado. Finalmente apareció, pues en otro acto ejemplar intento, encerrar al caballo en algún cercado, pero finalmente fue inutil.
Tras el reagrupamiento, y con la compañía del agua emprendemos la subida hasta la Venta del Charco, donde en esta ocasión paramos a realizar el avituallamiento, y asi evitar entrar a Cardeña.Aqui Antonio de Villa del Río, nos dejó pues debia de estar pronto en casa.
Tras el avituallamiento, y apretando el agua, nos dispusimos a ir al centro de visitantes, para cojer la carretera de los muros, por la que emprenderiamos la vuelta. Los que realizaron esta ruta por primera vez quedaron prendados del paisaje y carretera, aunque el cala bobos por monentos paso a ser lluvia, y por tanto la carretera se puso muy peligrosa. No hay problema, es un lujo montar en bici, con gotas de lluvia fina, sin frio ni calor, aunque a los que llevamos gafas graduadas es un engorro, pero bienvenido engorro. Eso si, las curvas y en vajada, con mucha, mucha precaución.
Ya llegando al arenosillo, empezó a salir el sol, y este se hizo notar. Aqui, cuando la pareja del Mitshubishi no dejo de adelantar, cosa que hicieron 3~4 veces, nos hicimos la foto de grupo.
Tras la foto, subimos hasta el cruce de la nacional, bajamos a Montoro, subimos a los bomberos, y a un buen ritmo llegamos a Villa del Río, donde aprovechando la feria, el compañero Juan Antonio nos invitó a unas cervecitas.
Despues del rato de feria, nos volvimos hasta Lopera a un muy buen ritmo, pues ya era tarde, y la familia esperaba para comer, llegando a Lopera a las 13.35 tras 110 km de una bonita, lluviosa y estupenda ruta.
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