Lopera Bike

domingo, 13 de agosto de 2017

Crónica Ruta Castro del Río



Se acerca la semana de feria, y se multiplican los eventos, como el Lopera Rock de la pasada noche, que mermó la participación en la ruta de hoy. 

Por tanto, los nueve valientes que nos dimos cita a las 7:30 am en el punto de inicio, partimos dirección a Porcuna, para en esta ocasión realizar la ruta de Castro del Río en sentido contrario a lo habitual. Buena mañana y agradable temperatura, la que tuvimos prácticamente en toda la ruta.

Al llegar al cruce de Porcuna, Pepe toma la cabeza del grupo, y pone un ritmo de aupa, que en los dos últimos kilómetros antes de Cañete llega a ser de escándalo, pasando factura entre otros a Antonio Gutierrez, que por indisposición decide volverse para Lopera. No es de extrañar que realizáramos RP casi todos en el Strava.



Ya con ocho en la carretera, y a un ritmo mucho mas llevadero, buscamos las faldas del Alto de Torreparedones, donde de nuevo Pepe con Jr se escapan del grupo, subiendo el puerto en su particular pique. El resto en varios grupos subimos cada cual a su ritmo, aunque terminada la subida quedan unos kilómetros finales de "subebajas" que hacen mella en las piernas. Finalmente llegamos a Castro, y nos encontramos con el bar de costumbre cerrado, por lo que buscamos alternativa en la plaza del pueblo. Parece ser que anoche fue la fiesta de la gamba o algo así, según un lugareño nos indicó.

Como de costumbre desayuno de tostadas con jamón y refresco de cola, para a continuación hacernos la foto de grupo, que siguiendo con las fiestas, decidieron hacer a las puertas de una discoteca.


Y como esto iba de fiesta, pues seguimos con la fiesta. Vaya 25 km nos pegamos de Castro a Bujalance, impresionantes. Jr se escapa sin darnos ni siquiera tiempo a montarnos en la bici, en esta ocasión le acompaña el presi y Pedro Chueco, que en breve cede. Por detrás Pepe se pone en cabeza, y en un cansino y pestoso terreno, tendiendo en subida, por debajo de los 35 km/h apenas vi el cuenta. Antonio Pedrosa para a un pis, y a poco de ello Pedro Chueco no ve ve una de las múltiples rajas que tiene este malísimo asfalto y está a punto de caer y por ende tirarme a mi. Este susto al menos nos hizo parar, 1 minutillo, para descansar y que Antonio se reenganchara. Pero solo fue un espejismo, de nuevo al tren. Estos 25 km se me hicieron eternos, por el ritmo, por el asfalto, las rectas, la pendiente, en fin me desgastó mas de la cuenta, aunque finalmente llegamos por fin a Bujalance, previa captura de los fugados (  Presi y Jr ), que a 3 km decidieron esperarnos.



La vuelta a Lopera, la realizamos por la carretera del cruce los ochos, salvo Pepe que se fue para El Carpio, y los Antonio ( Pedrosa y Moscoso) que se fueron por Villa del Río. Por tanto Diego, Pedro, el presi, Jr y yo, llegamos a Lopera, con unas ganas enormes de tomar las frescas cervezas, y con las piernas calentitas, calentitas.

En el Batacha refrigerio para paliar la dureza de esta  ruta de 97 km, con 1.200 metros de desnivel.



La semana que viene no habrá ruta oficial por el inicio de la feria, no obstante de martes a sábado se realizarán rutas, que los que la hagan irán comentando por guasap.

Por último desearos una feliz feria, y vacaciones. 

domingo, 6 de agosto de 2017

Crónica Subida A Cerro Muriano



Parodiando un anuncio de televisión, levantarse a las 6:10 am y que el coche te marque 30º "no tiene precio". Y que realicemos por segundo año consecutivo la ruta de la subida al Muriano y Andrés se vuelva a perder " tampoco tiene precio ".

Y es que, menuda semana de altas temperaturas, y calurosas noches, estamos soportando, por lo que la hora de quedada para partir hasta El Carpio se acordó a las 6:45 am. Allí nos presentamos 9 socios para viajar en coche hasta el punto de inicio, situado en el restaurante El Cruce.



Y entonces Andrés se perdió, literalmente, como el año pasado, aunque está vez en coche. Al llegar a la rotonda de la salida de la autovía, con las instrucciones de su copiloto, Benitin, que aún  no se había acostado por la "boda de oro", en lugar de ir dirección El Carpio, se fue para Córdoba. Imaginaros las risas cuando el resto de componentes llegamos al lugar pactado, y comentamos el hecho. De película. A los 10 minutos aparecieron los "niños perdidos".

Los niños perdidos
Por fin todos juntos, e iniciamos la marcha, o eso creíamos, cuando Benitin da la voz de alarma. Problema en la rueda. Y es que desde que la compró hace 20 años no le ha cambiado las zapatas de frenos, y al quitar la rueda para transportarla, la zapata quería seguir pegada a su rueda pues la echaba de menos. En fin cosas de Benitin.



Por fin empezamos a rodar, e iniciamos el tramo de los toboganes, a buen ritmo hasta el Puente Mocho, y mayor aún hasta Alcolea, y todavía mas hasta Córdoba. Yo pensaba que la ruta acababa en Córdoba por el ritmo al que se iba, con Pedro Chueco y Antonio Torres en cabeza. En Córdoba, con precaución nos incorporamos a la autovía de Badajoz, para a pocos kilómetros salirnos a la antigua carretera donde daría comienzo la subida al Muriano.



Mas de 10 km nos esperaban de ascensión. En cabeza no nos dimos cuenta de que Diego rompió la cadena, por lo que Antonio Jr, Antonio Torres, Pedro Cabrera, Pedro Chueco y yo, seguimos a nuestro ritmo camino de la cima. Al tercio de la subida Jr nos deja, y nos quedamos Pedro y yo tras su estela. No sé como nos apañamos pero en las últimas rutas Pedro Cabera y yo hemos tirado tras Jr en las ascensiones. En esta casi acaba con nosotros, y si dura 100 metros mas casco. Por detrás, José tras arreglar Diego la cadena, hace una subida en sprint, por miedo a que lo cogiera la "Luci" y buscando el pillarnos a la cabeza. Finalmente ni nos pilló ni Luci lo pilló, aunque no veas como sube esta chica.



Parada en la rotonda donde desayunamos unas tostadas con jamón, a la que se invitó una avispa carnívora, y donde tras la foto  de grupo y desestimar visitar a la "sargento", pues era una buena hora y no nos fiábamos del calor, iniciamos la bajada, que es todo un gustazo, aunque con algo de cautela por las motos, que en la subida nos dieron algún sustillo.



Realizamos sin problemas la entrada a Córdoba, cogiendo a continuación un buen ritmo, adecuado para el grupo, de 30-32 km/h, que nos hizo todos juntos atravesar el polígono, llegar a Alcolea, y presentarnos en los coches a las 11.15 am con 41º de temperatura, para dar por finalizada la ruta, con unos 76 km y 935 metros de desnivel acumulado, y sin que Andrés se volviera a peder al finalizar los cansinos.

Montaje de las bicis, y todos a Lopera, donde en el Batacha nos tomamos unas refrescantes cervezas, acompañados por Antonio Moscoso y el gato, que llegaron de su ruta a los Pinos.