Recapitulando lo acontecido en la ruta mañanera de hoy, caí en la cuenta de que de los diez participantes, cinco tenemos como nombre Antonio ( Izquierdo, Pedrosa, Torres, Moscoso y Bruna ), por lo que decidí apodar de esta manera, a esta ruta inédita como oficial de carretera.
De nuevo, nueve socios nos dimos cita a las 7 am ( en Bujalance se nos unió Manuel Jesús ), para realizar la rura propuesta. En esta ocasión la carrera nocturna de running, en la que participaron algunos de nuestros socios, tanto como corredores, como "moto escoba", y las salidas nocturnas, mermaron el pelotón, en el que participaba de nuevo, tras un largo periplo de inactividad nuestro compañero Juan Martinez.
A las 7.10 am, partimos hacia Porcuna con un maravilloso fresquito, sin necesidad de aire acondicionado, en una suave marcha con diferentes conversaciones entre todos, llegando a Porcuna en un abrir y cerrar de ojos, para iniciar la bajada hacia Valenzuela, rápida como de costumbre, y con cuidado por el asfalto deformado en algún que otro tramo.
En Valenzuela, tras reagruparnos, nos dirigimos hacia Bujalance en grupo, el cual se dividió en dos al llegar a la subida, pues tres decidieron acometer la ascensión, y el resto bordearla tal y como estaba previsto, juntandonos todos de nuevo a 5 km de Bujalance.
A 3 km, noto la rueda trasera floja y paramos a repararla. El grupo no se percató del percance, pero con ayuda del "presi" y Antonio Pedrosa logramos arreglarla. Terminando, llegaron una avanzadilla preocupados al hecharnos de menos y ya todos juntos llegamos a Bujalance, donde paramos en una gasolinera a inflar correctamente la rueda. Aqui se incorporó al grupo Manuel Jesús, decidiendo desayunar en Montoro.
Camino hacia Montoro, a un buen ritmo, y parando a desayunar en el Hostal. A la llegada al mismo, la presencia de otro grupo de ciclistas, con sus bicis aparcadas en la entrada. Las nuestras las dejamos junto a las suyas, con el deseo de todos, de que al volver a recogerlas, nos las hubieran cambiado, porque vaya maquinones que se gastaban los compañeros. Buen desayuno, y reinicio de la marcha, para realizar la foto de grupo en el puente de Montoro, y antes de iniciar la ascensión hasta la Fuensanta.
Tras la foto, iniciamos la ascensión de la jornada, en un grupo fragmentado y ya con la calor haciendo de las suyas. Además una gran cantidad de cacas de caballo, hacían la respiración desagradable. En plena subida, Pepe y Manuel que ya habian coronado, retrocedieron hasta cola de pelotón intentando ayudar a Juan, que iba ya cascado, pero este se resistía, tirando de coraje y no dejando que le empujaran. No obstante no pudo impedir la instantánea.
De la Fuensanta, hasta el inicio de la cuesta Peralta, el pelotón en grupo, marchamos a un buen ritmo, y con la temperatura en aumento. Como ya va siendo costumbre, iniciamos la ascensión a Peralta, donde Juan recibió la puntilla, con un sol y calor ya de justicia. Pero subió, y todos juntos ya en una marcha suave soltado las piernas, llegamos a Lopera, a las 12.30 horas, con 38° y mas de 96 km en las piernas.
En la sede nos esperaba Diego, que tras su dia de playita del Sábado no pudo acompañarnos hoy, pero que nos tenía los aperitivos y la sede preparada como de costumbre suele hacer. En definitiva, nueva ruta, con un kilometraje interesante pero sin mucha dificultad.
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